Doctor, científico, parlamentario y negro retinto

Si en Cuba se violaran los derechos humanos Daniel Agramante no sería ni doctor en ciencias, ni diputado, ni hablara Ingles, es más no recibiría tratamiento médico.
Por Lourdes Rey Veitia
El Dr. Daniel Agramonte Peñalver , director del Instituto de Biotecnología de las Plantas (IBP), de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas, es un hombre del ébano, tan oscuro como una de nuestras noches sin estrellas, como decimos en Cuba: “un negro retinto”.
Agramante ha comentado que ha asistido a eventos científicos de carácter internacional en los más disímiles países del mundo y sus colegas lo han mirado con reservas, incluso le han preguntado cómo un hombre joven y de su color puede ser el director de un centro de tanto renombre. Luego cuando escuchan sus ponencias y lo ven hablar en varios idiomas siente que lo respetan y que esas dudas pasan a un segundo plano.
El centro que dirige este “negrito” tiene entre sus objetivos el desarrollo de investigaciones mediante la aplicación de técnicas biotecnológicas para lograr el mejoramiento genético de las plantas y la producción de semillas de alta calidad en cultivos como caña de azúcar, plátanos y bananos, papa y forestales.. Cuenta con una biofábrica que permite una estrecha unión con la producción y aporta millones de vitroplantas anualmente. Han realizado cambios a los esquemas clásicos de producción de semillas plantando las vitroplantas directamente en el campo, con lo cual se ha incrementado el número de minitubérculos y se ha disminuido el de multiplicaciones.
Él además es uno de los representantes, elegidos por el pueblo en votación democrática, del parlamento cubano. Nada lo limitó para ello ni su juventud, ni su color, sus cualidades personales y sus aportes a la nación como investigador lo llevaron a ascender hasta ese escalón.
Este hombre está además enfermo, padece de insuficiencia renal crónica y varias veces a la semana -como cualquier ciudadano cubano que sufre esta enfermedad- recibe tratamiento de hemodiálisis totalmente gratuito, el que en cualquier otro país del mundo costaría millones de dólares. Para Agramante esto tampoco ha sido una limitante para ser quien es en la sociedad cubana.
Al habla con él encuentras a una persona que se siente reconocida, querida y apoyada, alguien en quien se resumen las conquistas y los derechos humanos obtenidas por los cubanos en estas cinco décadas de Revolución. Este “negrito retinto”, joven y enfermo es diputado, científico, doctor, habla Ingles y tiene el honor de ser uno de los especialistas que ha impulsado la introducir la semilla de papa cubana para su futuro desarrollo en la agricultura de la Isla.